Si además contamos con nuestras peras de Rincón de Soto pues la categoría del postre alcanza lo sublime.
Puedo parecer exagerada pero es que cuando cogí con la cuchara un trozo de pera con el merengue crujiente por fuera y tierno por dentro, añadido al relleno de nata y yogur griego contrastando con el amargor del chocolate negro...¡uhmmmm! solo recordarlo ya es una delicia.
Pero es que además la presentación es elegante y parece que la pera esta en su trono correspondiente como una reina. No merece menos.