El 24 de Junio celebramos San Juan. Es una fecha que me trae muy buenos recuerdos . Empezaría por los carros enrramados que nos llevaban al EBRO para hacer comida con l@s amig@s.
En las orillas de nuestro río (las ontanillas), hemos disfrutado de lo lindo. Ahora somos mas comodones y nos quedamos en los cuartos.
También recuerdo que nos dormíamos todas las amigas juntas; bueno...lo de dormir es otra cosa. Pasábamos toda la noche riendo y hablando. ¡vaya! una gozada.
Actualmente, se ha convertido en tradición la degustación de MIGAS y chocolate en la mañana de San Juan, por parte del "Hogar de personas mayores".
Yo no me la pierdo y antes de ir a trabajar mi desayuno este día es bien consistente ¡je je!..
Como a mi sobrina Estela le gustan mucho y no pudo probarlas, me puse manos a la obra y aquí están las miguitas que le preparé.
Como siempre paso a paso.
Ingredientes:
- 2 panes del día anterior
- 2 chorizos (mejor de la manteca)
- 4 ajos
- 2 tiras de panceta
- aceite virgen extra
- 1 cucharadita de pim. molido (no está en la foto)
- Partimos el pan en láminas ó cuadraditos. A mi me gusta hacerlo como en la foto.
- Preparamos un tazón de agua con sal y espolvoreamos las migas con la mano.
- Tapamos y las dejamos reposar mínimo cuatro horas. Yo las dejo toda la noche.
- Cubrimos la base de un calderillo con aceite virgen extra.
- Ponemos los ajos en láminas y dejamos que tomen color .
- Retiramos los ajos y reservamos.
- Echamos la panceta troceada, dejamos que suelte toda la grasa y quede tostadita.
- Añadimos el chorizo picado y rehogamos.
- Ponemos la cucharada de pimentón.
- Enseguida ponemos el pan y empezamos a mezclar la migas.
- Con una cuchara de palo y a fuego suave vamos envolviendo las migas para que todas ellas queden empapadas.
- Hay que ser pacientes , cuesta un ratito .
- Cuando creamos que ya están, abriremos una miga y comprobamos su color.
- Continuamos hasta conseguir este colorcito.
- Añadimos los ajos que hemos reservado y servimos.
- Calientes ó frías están de vicio.
¡QUE APROVECHE!
- La naturaleza nos sorprende cada día. Es un recreo para la vista.