Hacer el vestido blanco de novia y no de otro color estuvo condicionado a la cantidad de fondant que tenía.
Fue premonitorio porque ... la sorpresa vendría en la comida .
Con un brindis precioso, Javi y Silvia nos anunciaban su boda para la próxima primavera.
La cara de todos se transformó en una gran sonrisa, acompañada de aplausos y gritos.
Todos pensaron que yo sabía algo porque hice el vestido de novia, ¡ja ja!. Resultó gracioso.
A todos les encantó la tarta .
-Comencé haciendo unos bizcochitos de chocolate y nata de 15 cm de diámetro.
-Corté por la mitad el de chocolate y el de nata lo dividí en tres.
-El siguiente paso fueron los rellenos.
-Fui alternando el color de los bizcochos para que el corte fuera mas vistoso.
-Coloqué los diques con crema de mantequilla y rellené de crema de limón (lemond curd).
-Cuando coloqué los 5 de altura y me di cuenta de que podía ser inestable decidí abandonar.
-No sabía cómo continuar pero al ver el dulce de leche que había hecho el día anterior me animó. Este iba a ser el pegamento mágico.
-Pero la muñequita resulta que era articulada y tuve que ponerle bien sujetas las rodillas con papel film.
-Hice el hueco con un cuchillo jamonero y ahí metí la Nancy.
-Ahora tocaba vestir a la novia.
-Primero le puse un flotador con fondant porque sus piernas son larguísimas y los bizcochos se quedaban cortos.
-Capa a capa fue tomando forma el vestido.
-No me lo podía creer. Nada se desmoronaba y estaba todavía en pie.
-Le hice un ramito de novia con calas blancas.
-Ella misma (la muñeca) lo sujetaba porque parecía que tenía vida.
-En la parte de atrás le coloqué un gran lazo con dos tiras.
-El peinado me costó hacerlo porque tiene el pelo largo y es difícil sujetarlo.
-El zapatito que asomaba como era rosa tuve que taparlo con fondant blanco.
-Así de bonita quedó.
-Una foto del corte.
-Espero que os haya gustado.
¡FELICIDADES SILVIA!